
La cosa empezó tal que asín, con esta cara terrible, provocada por la noche anterior. Txa, el "tercer hombre" de esta Santa Casa ( ese Ente que muy contadas veces nos honra con su presencia ) nos invitó a Aitor y a mi a la inauguración de un bar, su nuevo negocio familiar. Y la cerveza fluyó. Vaya si fluyó, tanto que Aitor, pese a sus gritos etílicos que afirmaban que vendría conmigo por la mañana, no se presentó en primera instancia. Así que tras ducharme, desayunar ,meterme una cafetera entre pecho y espalda y escuchando a los The Jam a todo volumen ( mano de santo para despertarse ) partí hacia el centro de Barcelona.
Primera cosa que no recordaba del Salón; las enormes colas de entrada; tuve la suerte de encontrarme a un conocido a mucha distancia de donde estaba y con todo el morro del mundo me colé junto a su grupo, saltándome a decenas de personas.
Hala, tras la astillada de rigor, un poco de telefoneo absurdo con Forfy hasta que nos encontramos con el y Saricchiella. Abrazos, como te va, etc etc... y más café, porque si no sabía que aquello no lo explicaba.
( Ya seas de Barcelona, Madrid o donde sea, todos bailamos con el TecnoVikingo ) La tontería absoluta empezó pronto, se acuñó en nada el grito "EXTREMO!!!" ( Forfy y un servidor tienen la tendencia de acuñar gritos temáticos cada vez que se encuentran, una o dos veces por año ) Juanma, Dani y Señora, Roski y los demás aparecieron y nos fuimos a comprar algo por ahí.
Al rato, Aitor llamó diciendo que ahora si tenía pinta de persona humana y que se uniría a nosotros para comer antes de irse al fútbol por la tarde. ( Le compadezco por el horrendo 0-0 que le regalaron el Barça y el Espanyol, dos equipos nadando actualmente en plena serie B )
Como dictan los cánones, lo primero que se debe hacer al padecer resaca es ir a un bar lo más rápidamente que puedas, y eso fue lo que hicimos. Eso si, era probablemente el Bar Más Estrecho de Barcelona, cosa que para los dos representantes de este blog, que como véis están lo que popularmente se conoce como "hermosotes", fue un buen handicap. Maese Higronauta a aquellas alturas ya se estaba quejando junto a Juanma de nosotros, la alocada juventud de hoy.
Tras las cervezas, Aitor desplegó el malvado plan con el que llevaba dándome la brasa desde un mes antes del Salón; ir a comer a "El Rincón Gallego", lugar de monstruosas ( por el tamaño ) tapas al que se empeñó en ir usando su clásico estilo cerril. El problema? Que el sitio estaba a reventar y no pudimos entrar. Justo cuando Aitor se desarmaba admitiendo que no sabía de más sitios cercanos, el líder gerontocrático del grupo por decisión propia, Sir Higronauta, pronunció las cuatro palabras mágicas "buffet.libre. 8 euros." Se le olvidó "cutre" pero por ese precio aceptamos. El local era pura psicotronía, una mezcla de cafetería antigua regentada por chinos que estaba llena de una extraña mezcla de cuadros que iban desde las fotos históricas a lo distorsionado o lo que sospecho eran excedentes de algún local gay fino de esos del eixample. El lavabo, con terciopelo rojo y un candelabro, era demencial. "Como si Lynch hubiera dirigido un video de Cradle of Filth" según Aitor. Tardamos un poco en relacionar el hecho de que la comida estuviera fría con el hecho de que cerca de nosotros había microondas. Demencial.

Tras la visita a Norma, Aitor y yo nos separamos del grupo un rato para irnos al Salón para que este pudiera ampliar su "fondo de estantería" de la DC, lo que se traduce básicamente en comprar todo el material de Batman que encontrara. Tras un descanso que un servidor necesitaba, Aitor se nos despidió y se fue al terrible derby catalán. Tras las firmas con Bagge se nos unió el gran Queco y nos fuimos a ua terraza azotada por el viento ártico en donde Saricchiella no nos dejaba escapar hasta que hubiéramos firmado en su libreta; para romper el hielo me propuse ser el primero.

La cena en aquel gallego fue increiblemente chunga. Se ha ganado a pulso el título de "Sitio al que no vuelvo" debido al que Kuroi Yume ( que no sale en la foto ) bautizó como el "House de los camareros", un tipo malcarado que no te deja salir si no le has pagado 10 céntimos o que golpea siempre con los platos vacíos sobre las mesas para establecer esa aura de "cuidadito conmigo, clientes, que voy cabreado" Tuvimos suerte de salir vivos. Yo por aquel momento ya iba derrengado, así que largué para casa a colapsarme y dejé a esta gente con su fiesta posterior.
El domingo siguiente fue de mucha tranquilidad; volví al Salón, mi postura fue casi todo el rato la de sentado ( tomando cafés con Roski, Kuroi y quien se pasara por aquella mesa donde Forfy me dejó guardando sus cosas mientras iban a que les firmara Purita Campos ) y el sitio donde comimos fue aceptable. Tras mucha chanza donde como siempre salieron Los Simpson ( Los Simpson son la vida, siempre tienen una respuesta relacionada con algo ) y unos cuantos cafés más, dejé a Fofy y Saricchiella en Sants, donde cojimos los respectivos trenes y para casa ( a dormir, en mi caso )
( Si hay algo más EXTREMO que nuestras caras en esta foto, no existe. Punto y pelota. )
Fue una gran fin de semana. Me ha rejuvenecido mi relación con el Salón y creo que iré volviendo los años posteriores, aunque solo sea para encontrarme con toda esta gente con la que me lo he pasado bomba. Un saludo para todos, nos seguimos leyendo en nuestros respectivos ( y EXTREMOS ) espacios virtuales!